Hace
casi 30 años que te conocí y sigo dedicado a ti con la ilusión del
primer día. Sabes que lo nuestro fue un amor a primera vista, un
flechazo de los que llegan a lo más hondo del alma y que nuestra
relación durará toda mi vida.
La
verdad es que en estos casi 30 años no has cambiado nada, te
conservas igual que el primer día. Pero eso que en un ser humano
puede resultar un halago, en ti es más bien un reproche. Ha pasado
el tiempo, la sociedad ha cambiado, la tecnología ha progresado, la
ciencia ha formulado nuevas teorías... pero tú te empeñas en
permanecer inalterable como si todo eso no te incumbiera.
La
verdad es que no estoy contigo por lo que eres, sino por lo que sé
que puedes llegar a ser. Por eso, creo que ya es hora de que dejes de
mirarte el ombligo y te decidas a cambiar. Aunque, en realidad, tú
eres como te hacemos los que estamos contigo, te pediría que
pusieras todo lo que esté en tu mano para ser distinta, que hagas de
la innovación tu motivación principal.
Me
gustaría que fueses más colaborativa, que dejes de ser tan
competitiva y que permitas que las personas compartan y cooperen para
alcanzar logros más importantes. Sería ideal que olvidaras la
manera de evaluar que utilizas habitualmente, y que convirtieras el
aprendizaje en tu razón de ser y que no le dieras tanta importancia
a aprobar, a las notas y a los rankings.
Sé
creativa, sé inclusiva, sé disruptiva, sé emotiva, pero sobre todo
no olvides nunca los intereses y las necesidades de los niños,
jóvenes y adultos con los que interactúas. Adáptate a ellos, ten
en cuenta sus talentos, sus inteligencias, su capacidad de asombro,
su curiosidad... no los trates a todos por igual, permite que cada
persona pueda desarrollar al máximo sus posibilidades.
Deja
de tenerle miedo a la tecnología... sé lista y alíate con ella, sé
inteligente e incorpora todo aquello que pueden aportarte las TIC.
Pero, eso sí, mantente firme y no pierdas tu esencia por hacerte
tecnológica.
No
olvides nunca que creo en ti, que creemos en ti, que sé que eres la
herramienta que puede hacer cambiar el mundo, que puede cambiar la
vida de las personas, que puede hacernos mejores.
Atentamente
tuyo.
P.D.:
No te dejes influenciar por aquellos que confunden la excelencia
educativa con la memorización y la recitación de contenidos en un
examen. No olvides nunca que tan importantes son los contenidos que
inculcas como los valores que transmites.
En esto estamos Salvador. Ánimo
ResponderEliminarNo olvides que trabajas con personas y sus sentimientos y emociones para aprender hay que tenerlos en cuenta. Saludos.
ResponderEliminarOh, Salvador! Sí yo fuera la educación desde luego que trataría de cambiar. Me hubieras conquistado con esta misiva. Ojalá algún día veamos el giro del que hablas. Enhorabuena por esta entrada.
ResponderEliminarFelicidades! No podría estar mejor explicado.
ResponderEliminarInteresante todo lo que tenga que ver con la mejora de la educación, os recomiendo esta nueva página: http://espacioeniac.com/
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