¿Por qué fracasan en la escuela alumnos con un buen cociente intelectual?
lunes, 1 de diciembre de 2014
“[...] lo más importante para el desarrollo de un niño no es la cantidad de información que se consigue meter en su cerebro durante sus primeros años. Lo crucial es si somos capaces de ayudarles a desarrollar un conjunto diverso de cualidades entre las que se incluyen la perseverancia, el autocontrol, la curiosidad, la meticulosidad, la resolución y la autoconfianza.” Paul Tough: Cómo triunfan los niños. Determinación, curiosidad y el poder del carácter. Madrid, Ediciones Palabra, 2014.
En el post anterior, Adelgazar el currículo para engordar el aprendizaje, comenté la necesidad de seleccionar mejor los conceptos e informaciones que deben enseñarse en nuestras escuelas para dejar espacio a la imaginación y a la creatividad, que son elementos fundamentales para un aprendizaje significativo.
Hoy me gustaría ir un poco más allá e intentar dar respuesta a estas cuestiones: ¿Por qué fracasan en la escuela alumnos con un cociente intelectual alto? ¿Por qué no tienen éxito en la vida personas con un alto nivel de formación académica?
Descubrí a Paul Tough durante una de las sesiones plenarias de WISE 2014. Me llamó poderosamente la atención su teoría de que los rasgos de personalidad, eso que llamamos carácter, tienen una incidencia fundamental en el éxito, ya sea escolar o vital, de las personas. Me interesó tanto que al día siguiente de llegar de Catar fui a la librería a comprar su libro Cómo triunfan los niños... Su lectura ha merecido la pena: la recomiendo.
A partir de la descripción y el análisis de diferentes experiencias de éxito académico, Tough nos invita a desarrollar en nuestros alumnos hábitos de conducta adecuados más que conseguir alcanzar objetivos intelectuales. Propone 7 destrezas para predecir el éxito en la vida: determinación, autocontrol, entusiasmo, inteligencia social, gratitud, optimismo y curiosidad. Está convencido de que estas destrezas pueden ser evaluadas y que, además, el perfil “intelectual” de los alumnos debería ir acompañado de su perfil de "personalidad". Afirma que el perfil de personalidad es un indicador más efectivo para predecir el éxito que el perfil intelectual.
En su opinión, para el éxito en la vida es más importante tener un alto nivel de tolerancia a la frustración que un alto coeficiente intelectual. Esta idea choca frontalmente con la creencia que predomina en la gran mayoría de nuestras escuelas de que la inteligencia es la clave del éxito. Pero todos conocemos casos de niños con altas capacidades que fracasan en la escuela, entre otras razones, porque no tienen perseverancia, autoconfianza ni meticulosidad. Pequeños monstruos tiranos que usan su "inteligencia" para imponer su voluntad a los adultos que les rodean (padres, docentes...) y que reaccionan airadamente cada vez que no consiguen lo que quieren en el momento en el que lo quieren.
Los alumnos que aprenden a ser meticulosos tienen más posibilidades de éxito en la vida que aquellos que llenan su cabeza de datos e informaciones. La meticulosidad es la cualidad que nos permite esforzarnos para hacer o conseguir algo sin esperar una recompensa inmediata... lo que hace que sea una cualidad fundamental para un buen desarrollo de las personas.
Tough también afirma que los profesores que muestran afecto a sus alumnos obtienen mejores resultados que aquellos que permanecen distantes. Y que hay que preparar a los alumnos para afrontar eficazmente las situaciones de estrés a las que se ven sometidas en las escuelas (suspender un examen, hacer los deberes a tiempo...).
Sé que muchos pensarán que el carácter es algo innato, pero no lo es. Se puede aprender a regular las emociones, a tener una mayor tolerancia a la frustración, a ser optimista... y, además, resulta que estos aprendizaje son más efectivos para tener éxito en la vida que la ciencia infusa del conocimiento erudito que se enseña en la mayoría de las escuelas.
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Hola, Salvador. Te sigo en twitter y me gustan la mayoría de tus artículos, pero tengo que decirte que en éste has hecho comentarios muy desafortunados. Como Psicóloga que atiende personas con Altas Capacidades y socia de una entidad de familias de hijos/as con Altas Capacidades el nombrarlos como pequeños monstruos tiranos es un gran insulto. No niego que haya personas "narcisistas" o con problemas de empatía o relación social, pero creo que tal como está escrito parece que relacionas el fracaso de estos niños exclusivamente a ese problema que para mí es grave y no es lo común en estos niños. Su fracaso no tiene nada que ver con su personalidad, sino con la falta de una buena atención educativa, como así denunciamos profesionales, educadores y familias.
ResponderEliminarApreciada Cristina. Lamento que mi torpeza al escribir haya provocado que te sientas molesta. No era en absoluto mi intención faltar el respeto a nadie (y mucho menos insultar). Bien al contrario, por cuestiones personales, estoy muy sensibilizado con este tema y coincido contigo en que la mayoría de las escuelas no están preparadas para adaptarse a los alumnos con altas capacidades, a diferencia de lo que sucede con los menos dotados.
EliminarAl utilizar la desafortunada expresión "pequeños monstruos tiranos" estaba pensando en un par de casos concretois que conozco y NUNCA en el conjunto de niños y niñas con altas capacidades.
Espero que este lamentable malentendido no impida que sigamos compartiendo ideas y experinecias educativas a través de las redes sociales.
Un abrazo
Hola, Salvador! Se me ha borrado el comentario! Gracias por tu rápida y aclaratoria respuesta! Me alegra saber que estás sensibilizado con el tema y que te referías sólo a casos puntuales. Yo también conozco un par de casos concretos de niños con falta de empatía, que utilizan a los demás, que no tienen remordimientos, y que sólo quieren "ganar" ellos, pero bajo mi punto de vista las causas son otras, más relacionadas con los referentes que tienen y un modelo de crianza basado en la falta de respeto hacia sus necesidades y falta de atención emocionalmente adecuada, y no a su "capacidad". Te tenía que decir algo al leerlo porque recibo a padres angustiados y a hijos/as perdidos totalmente y veo mucho sufrimiento alrededor de las AC. Seguimos compartiendo! Un abrazo!
ResponderEliminarYo soy maestro y en clase tengo a 2 niños de 8 años con capacidades intelectuales superiores a la media de sus compañeros. Uno de ellos tiene una bajísima tolerancia a la frustración y reacciona de manera violenta. El otro igual, pero a diferencia del anterior, también tiene infinitos problemas de relación con sus compañeros y compañeras.En ambos casos, esto ya era así desde muy pequeñitos e incluso en sus casas, no sólo en el colegio. Recuerdo varios casos de niños con altas capacidades intelectuales que no tuvieron ningún problema de personalidad que dificultase su aprendizaje. Es decir, que si fuese un problema del sistema educativo, ningún niño con altas capacidades intelectuales podría triunfar y, de hecho, los hay que sí triunfan. Pero bueno, supongo que todo es culpa de los educadores y los colegios. En caso contrario tendríamos que aceptar que hay personalidades difícilmente cambiables y que cada persona va tomando sus decisiones en base a sus creencias y personalidad, sea cual sea el sistema educativo y, claro, eso jamás sería aceptado por la psicología. Perderían muchos clientes. Estoy totalmente de acuerdo con el artículo, y no sólo para excepciones.
ResponderEliminarEl fracaso de los niños de Altas Capacidades está marcado por la incomprensión del problema. Se habla de ellos como si fuesen un grupo homogéneo pero son tremendamente diferentes como el resto de los niños.
EliminarLo importante es saber que muchas veces se confunde un alto rendimiento académico con Alta Capacidad y ésos no suelen tener problemas. Los que tienen talento académico también suelen detectados, "adaptados" y aceptados por los docentes.
El gran problema en la mayoria es lo que siempre nos molesta su alta intensidad emocional. Os recomiendo empaparos sobre la sobrexcitabilidad de Dabroski y ver un vídeo de Monserrat Romagossa en You Tube. A mi me hizo comprender mejor a mi hija. Destaco una frase " para ellos un roce es un golpe, un sonido es un ruido, un amigo es un amante, un amante es un Dios, la alegría el éxtasis y el fracaso la muerte.
No es fácil manejar eso y necesitan primero comprensión de ese realidad y desde ahí , ayuda de padres, profesores y psicólogos preparados para atenderles. No es fácil, pero es imposible si partimos de una base errónea y con prejuicios.
Yo lo he comprendido después de mucho esfuerzo, sufrimiento y estudio con la tercera. Sus 2 hermanos sufrieron Bulling y a ella con 5 años y a pesar de que yo soy maestra la he tenido que sacar del sistema educativo.
Comprensión y preparación, por favor
En cuanto
Hola Salvador, me siento identificada con tus comentaios, yo si creo que es posible moldear el caracter y la personalidad. Cuesta mucho trabajo, se requiere mucho empeño y si lo estamos tratando de hacer con alguién más se requiere mucha tolerancia y autocontrol pero se logra. Me parece que en la educación formal nos hace falta que se incluya el conocimiento y el manejo de las emociones, en cuanto más nos conocemos mejor nos movemos, cuando sabes detectar si el mal humor es por hambre, sed, enfermedad, tristeza, etc., es más sencillo solucionarlo y seguir con las actividades y la vida. Saludos.
ResponderEliminarConozco bastantes casos de niños de Altas Capacidades por pertenecer a una asociación y ser mi hijo uno de ellos. Estoy de acuerdo en la idea de que otras características predicen mejor el éxito escolar que el coeficiente de inteligencia. Eso parece indicar todos los estudios que se van conociendo.
ResponderEliminarNunca he oído que exista una relación entre determinación, autocontrol, entusiasmo, inteligencia social, gratitud, optimismo y curiosidad con las Altas Capacidades. Bueno si quizá para esta última, pero una correlación positiva.
Parece que ves algo negativo en llenar la cabeza de datos e informaciones. La verdad es que, más que llenarla ellos, se les llena sola y no precisamente en la escuela sino en todo momento.
Supongo que habrá multitud de razones para el fracaso escolar de cualquier niño y muchas de ellas serán comunes a los niños de Altas Capacidades, menos la falta de inteligencia. Lo que no me gusta de tu exposición es que titulas “¿Por qué fracasan en la escuela alumnos con un cociente intelectual alto?” y das razones que valen para cualquier niño. Sin embargo me parece que hay un motivo de fracaso claramente específico de los niños de Altas Capacidades y es la incapacidad del sistema educativo de adaptarse a su ritmo.
Cuando hablamos de autocontrol, de resolución, de autoconfianza, etc. estamos hablando de las Funciones Ejecutivas. Funciones del cerebro de alta integración de información, con sustento en la corteza prefontal. ¡A no olvidarse de la relación cerebro- conducta y a proponer a los mas chiquitos actividades de estímulo para la integración de estas funciones, esenciales en el trabajo cognitivo en general!!!
ResponderEliminarHola Salvador, sería interesante matizar este párrafo : "Pequeños monstruos tiranos que usan su "inteligencia" para imponer su voluntad a los adultos que les rodean (padres, docentes...) y que reaccionan airadamente cada vez que no consiguen lo que quieren en el momento en el que lo quieren.". Ser inteligente y ser un tirano no son cualidades que correlacionan. Ningún estudio lo demuestra y es una suposición y generalización ofensiva y falta de rigor. Los niños de alta capacidad que fracasan en la escuela son, por lo general y como bien apuntas, niños en los que la falta de reto que les propone la escuela les ha negado la oportunidad de desarrollar esas cualidades que efectivamente son tan necesarias y determinantes para lograr desarrollar tu potencial al máximo, obtener logros y hasta reconocimiento en la vida, como son la perseverancia, la persistencia, la resistencia a la frustración, el esfuerzo, etc.. Precisamente esa y no otra, es la reclamación que las familias de niños de alta capacidad reclamamos. Y la respuesta que encontramos es que como "van bien, no hay que hacer nada". La escuela es la responsable de proponer retos intelectuales a cada niño al nivel de su capacidad, para asegurarse precisamente de que desarrollan estas cualidades y puedan pues obtener logros al nivel de su capacidad y no engrosar las listas de fracaso escolar. El fracaso es de los educadores que se empeñan en ver la capacidad como una amenaza, en atribuirle comportamientos negativos que no son generales y que muchas veces son reacciones a un entorno que no les valora ni les reta. El artículo es muy didáctico e instructivo, y ese párrafo no sólo no le aporta nada, sino que lo afea. Pues esas cualidades que apuntas tan necesarias se desarrollan en los niños como reacción a los retos que han tenido que ir superando en la vida. Si nunca le ponemos un reto a su altura ¿Podemos esperar que las desarrolle?. Ah, por cierto, tener un elevado cociente intelectual y ser una persona que acumula datos, tampoco correlaciona. No son la misma cosa. Gracias.
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